Convivencia

Entendemos por convivencia positiva la capacidad que como miembros de una comunidad educativa tenemos para vivir y trabajar juntos, compartiendo un mismo proyecto en el que el respeto, la tolerancia y la escucha activa sean las señas de identidad de este grupo de colaboradores.

De la convivencia esperamos que nos proporcione un ambiente agradable, alegre y de confianza donde la comunicación y el diálogo sean fluidos y se tengan en cuenta las individualidades.

Por ello consideramos que las relaciones interpersonales pueden ser mejoradas mediante un plan de convivencia asumido por todos sus miembros, un plan realista, que nos haga sentirnos partícipes y protagonistas, se base en la libertad de todos los miembros para expresar sus ideas y puedan llegar a acuerdos.

Así mismo, tendremos que esforzarnos y trabajar por encontrar los tiempos y los espacios de relación entre todos nosotros: padres y madres de familia, profesorado, alumnado, personal no docente y de servicios, que a día de hoy no nos satisface.

Las normas de convivencia son las pautas que nos ayudan a respetar los derechos de los individuos, nos dirigen en el proceso de socialización y nos marcan el camino a seguir para mejorar las relaciones de los miembros de nuestra comunidad.

Las normas que ya tenemos y que fueron elaboradas y consensuadas por el claustro de profesores, serán dadas a conocer al resto de los sectores de la comunidad para que entre todos se reelaboren, reflejando en ellas el sentir mayoritario y por tanto su aceptación.

En este nuestro centro de San Martín los conflictos son parte de la vida escolar que en ocasiones nos hacen sentirnos impotentes, incapaces de solucionar el problema, pero que en cualquier caso nos cuestionan y nos hacen reflexionar para conseguir unas relaciones más positivas.